Por: UDLA Online
10 noviembre de 2025

La brecha digital es la diferencia real y cotidiana en el acceso, uso y aprovechamiento de la tecnología entre distintos sectores sociales en América Latina, y afecta directamente oportunidades educativas, laborales y de inclusión para millones de personas.
Así como sucedió en comunidades rurales de Puno, Perú —donde estudiantes debían escalar cerros bajo la lluvia para captar señal y acceder a clases virtuales— en Ecuador la desigualdad tecnológica condiciona aspiraciones, resultados educativos y hasta el desarrollo local.
Durante el 2020, la brecha digital dificultó la educación remota a miles de estudiantes y puso en evidencia los retos para acceder a servicios públicos y participar en la tecnología en la actualidad.
Las estadísticas nacionales y las noticias tecnológicas advierten que casi la mitad de los hogares del quintil más bajo de ingresos no dispone de computadoras o tablets en casa.
En 2025, Ecuador alcanzó una cobertura nacional de Internet cercana al 65%, pero el contraste urbano-rural sigue siendo enorme: apenas 40% de los hogares rurales reportan acceso regular.
En las tendencias tecnológicas del último año, el Estado y actores privados han impulsado proyectos de conectividad satelital, laboratorios escolares y capacitación docente para cerrar la brecha digital en Ecuador.
Uno de los avances tecnológicos más relevantes es el plan de instalación de mil puntos de acceso gratuito a internet en escuelas rurales, desarrollado junto al BID. Además, se han equipado más de 2 000 laboratorios y entregado dispositivos a docentes y estudiantes, fortaleciendo la cobertura y la inclusión tecnológica en el país.
La formación digital también avanza, acompañada de iniciativas orientadas a la seguridad cibernética y al uso responsable de la tecnología en la actualidad. El verdadero desafío está en resolver problemas de infraestructura insuficiente, reducir las brechas de alfabetización digital y asegurar la sostenibilidad de las políticas públicas que permitan que todos, sin importar su contexto, desarrollen las habilidades necesarias para aprovechar la tecnología en su vida cotidiana y profesional.
La estrategia nacional para la transformación digital reconoce que conectar al Ecuador requiere mucho más que repartir dispositivos o instalar redes. Según la Agenda de Transformación Digital, el reto exige impulsar infraestructura de calidad, garantizar capacitación local, fortalecer soporte técnico y promover la creación de contenido pertinente para todos los usuarios.
Ecuador necesita potenciar la educación digital desde edades tempranas, desarrollar infraestructura robusta y promover la alfabetización digital para todos los grupos sociales. Para quienes buscan fortalecer esas competencias, programas como los diplomados en sistemas informáticos y la Maestría en Big Data y Business Intelligence ofrecen formación especializada.
Las noticias tecnológicas insisten en la urgencia de invertir en talento, innovación y proyectos adaptados a las necesidades rurales y urbanas. El compromiso colectivo con la equidad digital es fundamental para que nadie tenga que depender de condiciones extremas para ejercer su derecho a la educación y la ciudadanía digital.
Cerrar la brecha digital es más que un objetivo estadístico: es esencial para lograr que los avances tecnológicos del Ecuador sean relevantes y tengan el impacto tan necesario en todas las comunidades.
Fuentes: